RedacciónSi de algo puede preciarse el Circuito de Pádel Estrella Damm, además, por supuesto, de ofrecer una gran competición, es de fortalecer relaciones entre los amantes del pádel. Estas relaciones pueden ser entre amigos, parejas o entre padres/madres e hijos/hijas. Hoy queremos centrarnos en estas últimas. Pero ¿esto es posible cuando los hijos o hijas entran en la mayoría de edad y comienzan a distanciarse de hacer planes familiares?
En la fotografía, Miguel Vizcaíno hijo.
El Circuito de Pádel Estrella Damm es testigo de que sí lo es. Y es que, el Circuito cuenta en sus Torneos Express con muchas parejas formadas por padres/madres e hijos/hijas. Estas parejas encuentran, en el pádel, una manera de conectar más allá de las rutinas diarias. El pádel se convierte en una actividad significativa para su relación.
Miguel Vizcaíno y Cristina Cristobal son dos veteranos de nuestro Circuito. Hoy Miguel, juega con su hijo Miguel y Cristina con su hija Carolina. Ambos nos trasladan qué les aporta este hecho y comienzan destacando la alegría que les produce el mero hecho de que sus hijos quieran compartir tiempo y una actividad con ellos.
CIRCUITO: ¿Qué te aporta participar con vuestros hijos para reforzar vuestro vínculo?
M. V.: Yo que soy hijo de padres divorciados y que no tengo mucha relación con mi padre, jugar con mi hijo me ayuda mucho a conocerle. Gracias al pádel mi hijo me cuenta muchas cosas que yo jamás le hubiera contado a mi padre.
El deporte enseña valores importantes, como la perseverancia, la disciplina y el trabajo en equipo. Al jugar con nuestros hijos, les mostramos cómo enfrentar los desafíos con determinación y cómo celebrar las victorias con humildad. La cancha brinda la oportunidad de transmitir lecciones de vida valiosas como la perseverancia, la disciplina y el trabajo en equipo, pero para Miguel y Cristina hay dos que destacan por encima de toda: el respeto y la humildad.
CIRCUITO: ¿Qué tratas de transmitir en el plano personal?
C. C.: A mí, lo que me gustaría que aprendiese mi hija es que no siempre te salen las cosas como tú quieres y que hay gente mejor en todos los campos de la vida, pero eso no te hace a ti peor.
M. V.: Sin duda alguna, algo importantísimo a transmitir es que se ha de ser respetuoso siempre con los rivales y que se tiene que disfrutar cuando se juega. El hecho de querer ganar no ha de llevarte a no comportarse bien en la pista.
CIRCUITO: ¿Qué has aprendido de tu hijo/hija en la pista?
M. V.: Su perseverancia y sus ganas de seguir. Como le sigue gustando como el primer día. Pese a sus pequeños fracasos en menores lo que me llama la atención es lo que le gusta el pádel y lo que disfruta con este deporte. Cómo mejora poco a poco y no se rinde. Estoy convencido de que llegará a ser un gran jugador.
C. C.: Aprender a gestionar emociones, discutes y te reconcilias rápidamente e incluso empiezas a conseguir no discutir. Viéndola, sé que hay que mejorar la gestión de las frustraciones.
CIRCUITO: ¿Tienes algún recuerdo bonito que quieras destacar?
C. C.: Yo destacaría no solo el tiempo en el torneo, sino la ilusión con que te preparas para ir a jugar juntas.
M. V.: Siempre son buenos recuerdos los torneos ganados, pero yo me quedo con el ver que, a mi hijo, a sus 18 años, le encanta este deporte y que sigue con la misma motivación de su primer día.
Así que ya sabéis, desde el Circuito de Pádel Estrella Damm, os animamos a que hagáis del pádel una tradición familiar.
Así que ya sabéis, desde el Circuito de Pádel Estrella Damm, os animamos a que hagáis del pádel una tradición familiar con la que fortalecer lazos familiares.
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